Silvana López Moreira, la mujer que devuelve la figura de la primera dama a Paraguay

Silvana López Moreira, empresaria de 44 años y esposa del recién electo presidente Mario Abdo Benítez –del histórico Partido Colorado y procedente de una familia ligada al exdictador Alfredo Stroessner–, va a convertirse en la primera dama de Paraguay haciendo resurgir una figura que, en los últimos años, no ha existido.

La paraguaya, nieta del poderoso empresario –ligado a Stroessner–, Nicolás Bo Parodi, ha acompañado a su marido (casado en segundas nupcias) durante todo el proceso electoral, buscando especialmente el voto femenino, por lo que es una figura reconocida dentro de la sociedad del país. Además, Silvana procede de una familia de la alta sociedad paraguaya, por lo que goza de grandes e importantes círculos sociales en el país.

Se espera que López Moreira ostente el perdido Despacho de la Primera Dama, clausurado con la llegada del actual presidente de Paraguay, Horacio Cartes, divorciado y sin pareja en el momento de convertirse en mandatario del país sudamericano en 2013. Por otro lado, el expresidente y exobispo Fernando Lugo (2008-2012), estuvo acompañado por su hermana y su sobrina.

De esa manera, puede decirse que la presencia femenina vuelve a la residencia presidencial de Asunción después de casi 10 años, si bien es cierto que Emilia Alfaro, esposa de Federico Franco, ocupó el lugar después de la destitución de Lugo y hasta la victoria posterior de Cartes. Asimismo, se espera que llegue la presencia de jóvenes, pues el mandatario tiene dos hijos –Mario Abdo Díaz y Santiago Abdo Díaz– del primer matrimonio del presidente con Fátima María Díaz Benza.

Clave en la carrera electoral, Silvana López Moreira ha seguido una agenda propia durante todo el trascursos de la carrera electoral, siendo su bautizo electoral el Día de la Mujer Paraguaya, la jornada del 24 de febrero. Ese día, Silvana habló públicamente frente a seguidores de su marido y enfatizó en la importancia del papel de la mujer en la sociedad –desde un punto de vista muy tradicional–.

REUTERS

«Tenemos muchos roles: esposa, mamá, hija, hermana, amiga, profesional es difícil porque son muchas cosas, pero así y todo estamos acá hermosas para festejar nuestro día, o sea que se puede», dijo Silvana en esa ocasión, asegurando que es necesario que «es hora de dirigir nuestra mirada a esas familias, mujeres y niños que nos necesitan. Es hora de llegar a nuestra gente. A todos los caballeros les pedimos leyes que nos protejan, necesitamos que confíen en nosotras y mucho amor».

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